Iguazú: Patrimonio de la Humanidad

martes, 4 de junio de 2013

NUEVAS NOCIONES SOBRE LA VIEJA EUROPA



Hace unos días estuvo por en Principau d'Asturies un Economista español, profesor en Harvard, que invitado por EL Club de Calidad de Asturias dio una charla sobre el papel de España dentro de los nuevos sistemas de equilibrio en una Economía Internacional cada vez más globalizada. El ponente, un mocetón de dos metros de envergadura, tipo alapívot de los Dallas Maverics o Detroit Pistons, no era otro que Mauro F. Guillén, que ni es familia ni pariente lejano de la saga de actores, de igual apellido.
            Conocí a Mauro en tiempos mozos de estudios en la, por entonces, innovadora Facultad de Económicas del Cristo, porque a pesar de que él era leonés decidió cruzar los Picos de Europa en vez de atravesar la meseta para ir a Salamanca o, en su defecto, a Madrid como parecería lógico. Pero, aunque resultase a todas luces ilógico, por aquellas, había un ramillete de grandes profesionales de la Economía en Asturias, que desequilibraban en favor de Oviedo cualquier posible disyuntiva. Quien lo iba a pensar, desde la perspectiva actual, verdad???. Estaban, entonces, Joseé Luís García Delgado, Manuel Jesús González, Álvaro Cuervo, Juan Vázquez, Germán Ojeda, Rafael Anes. Jesús Arango y muchos otros, de igual prestigio, que durante años tuvieron mucho que decir en el contexto regional, nacional o internacional. Con tal plantel de primerísimas espadas, cualquier maletilla, un poco informado, se decidiría, sin pensarlo mucho, porsubir a Cristo, como decíamos por aquellas, para hacer algo más que tomarse sidra o comerse unos pinchos en “El Miguel”. Pululaba por allí, pupitres más atrás o adelante, otro gran economista en ciernes, Manolo Campa, que décadas después sería Secretario de Economía, en el último mandato de Zp. Ya entonces, a algunos, nos quedó claro el concepto de las dos velocidades que tanto se esgrime en la dialéctica trascendental de occidente. Porque Manolo y Mauro iban tres o cuatro marchas más rápido que el resto de los mortales que ocupábamos plaza en remozadas aulas, verdes de color y de ilusión.
            Pero que no nos ciegue la nostalgia, quiero dedicar esta columna a reproducir sus palabras, como humilde homenaje de un admirado compañero. Sería impensable, a la par que vanidoso por mi parte, pretender enmendar las perlas de sabiduría, que lo son, que nos dejo plasmadas.
            En una entrevista posterior, concedida a una periodista de La Nueva España, se centro en varios aspectos importantes que nuestro modelo económico debe revisar urgentemente. Y debe llamarnos la atención el que lo haga un librepensador que imparte docencia en Harvard y no un economista de tres al cuarto de les Cuenques Mineres, que ahora os aturde. Y como él, no en vano compartimos maestros, en docencia, estoy apostando por un urgente giro en las directrices de política nacional en dos campos sumamente importantes para nuestra economía; el primero, el del mercado de trabajo, cuya flexibilización y liberalización no nos llevan a ningún lugar más que a aumentar las listas del paro y el segundo, la necesaria aplicación de instrumentos de progresividad en la política fiscal, es decir que pague más los que más tienen y no se estrangule a las rentas medias y bajas. Todo ello, reconociendo que no podemos olvidarnos de medidas que garanticen la transparencia político social del momento para evitar lo que todos estáis pensando ahora mismo.
            La conclusión a toda esta retahila de planteamientos es la siguiente. Si no “tomamos el toro por los cuernos” y dejamos que siga meciendo la cuna, a su antojo, la niñera Merkel, en un arrebato de locura, hija de la tecnología alemana, el camastro puede volcarse dando con los huesos del infante en el suelo. Luego el serafín llorará y todos empezaremos a ponernos nerviosos. Y ¿por qué los economistas de la tardo-generación “X” somos de esta opinión, tan próxima a los planteamientos del Movimiento 15-M?. Sencillo, pensad que Alemania, como España, es una Democracia Parlamentaria, que renueva sus órganos de representación ciudadana con periódicas consultas electorales. Esto hace que quien quiera ser su Canciller, versión teutona de nuestro Presidente del Gobierno, debe seducir a las masas y bailarles el agua, por lo menos hasta haber ganado la consulta. Después puede montarse la película que le venga en gana. Mirémonos el ombligo, si no.
             En éstas, “Anggy” Merkel no puede hacer otra cosa que intentar adular unos oídos, los de los Nibelungos, para los que toda canción que entone, en su estribillo, salmos en favor de las ayudas el Sur no es bien aceptada y nunca entrará en las listas del “hit – parade” de su país. De ahí que la nueva dama de “fierro” europea se nos descuelgue de la rama con más recortes y menos moratorias para condimentar la dieta mediterránea. Y lo patético del tema, es que los “Arguiñanos” de turno y sus con-pinches de cocina, para demostrar lo buenos que son y ganarse una estrella michelín, se esfuerzan por sazonar y dar más picante a sus platos, olvidándose que nuestros estómagos no aceptan más excesos y que hay, en nuestra España, más de seis millones de personas se retuercen con úlceras de difícil curación en las listas del paro. Aunque, perdonad mi falta de tacto y respeto,a mi juicio, no les importar mucho, nada quizás. Solo debe interesarles el puesto de jefe de cocina en las calderas de Pedro Botero, versión fabulada de una cartera en el Banco Mundial, Naciones Unidad, etc. Pues que así sea, y si tanto lo anhelan que las próximas elecciones, a modo de erecciones nacionales, les garanticen una jubilación para poder “estudiar” a tiempo completo para tales oposiciones.

 Heri Gutiérrez Garcia. 

 El Economista Mauro atiende a la prensa.