Hoy, en una cadena de televisión en TDT, de las pocas que van a quedar a partir de mañana, se estrena, en abierto, la cuarta temporada de la serie "The Walking Dead". No, no es que yo sea un ente macabro, que quizás así sea, no. Pero me gusta todo tipo de elementos culturales que sirvan para, desde la narración de un futuro distópico, atacar al Sistema y sus perros guardianes...
La serie se basa en una colección de comics "made in USA" que tienen su origen en los zombies de las pelis de George A. Romero, un director hijo de cubano nacido en el Bronx. Recuerdo cuándo un periodista le preguntó en un rueda de prensa reciente que si sus personajes, los zombies, representaban a los desafortunados del mundo, a lo que el contestó "esta es la pregunta más inteligente que me han hecho en la vida...Por fín alguien ve más que vísceras y sangre..."
Pues bien, he aquí mi la causa de mi "enganche" a la serie. Más allá de la adrenalina que tus glándulas generen al sentirte perseguido como Rick. o sus colegas, o el miedo a estar rodeado de "mordedores"...La retórica del eros - tánatos que nos empuja hacia aquello que nos da miedo. Y que más terror se puede sentir ante la cada vez mayor probabilidad de quedarte en la calle, tener que vivir de las sobras del Sistema y relegarte a gruñir sin tener la capacidad para articular una palabra, que en el fondo no es más que la imposibilidad de acceder a las fuentes de información, manipuladas por algunos.
Por eso, esta serie, va más allá del mero juego que se imbrica en la huida, matanza de zombies; se trata en el fondo de sobrevivir contra un jodido Sistema Neocon que nos está llevando a todos a la chingada madre.
Esperemos que no lo logren. Carpe diem, amig@s
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| Las puertas del Averno Neoliberal a punto de abrirse y tragarnos a todos |
