Iguazú: Patrimonio de la Humanidad

miércoles, 9 de noviembre de 2022

QUE PENA SER UN CIUDADANO NORMAL

 

Milton Friedman, Premio Nobel de Economía en 1976, pasará además a la historia como creador de la Escuela de Chicago, cobijo de las más rancias y reaccionarias huestes neoliberales. Dicha secta propone un modelo económico regido por el dios-mercado y pretende impedir la actuación, en su dialéctica intromisión, del Estado. Pero ese aura de libertad desaparece cuando se reúnen en sus siniestros templos de la doctrina Neocon. Allí, sin cortapisas, ni opositores, todo el aforo lleno y rendido, plantean abiertamente la destrucción del Estado de Bienestar y que la ley de la selva sea norma en la economía. No importa la ciudadanía ni sus necesidades; adoran a un becerro de oro ante el que sacrifican al resto de los de su especie a cambio de billones de poder fáctico, mas que de dinero. Por que eso les pone.

Lo más triste, es que muchos currantes dan por buena esta receta sazonada, por cocineros expertos, con salsas racistas y xenófobas. Un plato condimentado con veneno para quien lo consuma. Y para engancharnos, siempre la primera dosis es gratis. Así la culpa de todo mal es de los inmigrantes que llegan en patera a “quitarnos el trabajo”, de las mujeres que dejaron “sus labores” propias del género y se emanciparon o de quienes en la exclusión social necesitan ayudas para poder vivir. Y como hace años que se cargaron la Educación de calidad y con ella las entendederas, cualquier eslogan que nos aleje la propia culpa es bien digerido, pese a que nos impida superar el nivel intelectual de un párvulo.

Nada nuevo bajo el sol; recordad que fueron grandes empresas de los USA y capital de familias judías las que financiaron el ascenso de Hitler y el comienzo de su “cruzada” o que algunas de las empresas del IBEX sirvieron a Franco en el golpe de estado de 1936 y a su ejército sublevado durante la Guerra Civil; en recompensa, mano de obra esclava de reos republicanos para crecer.

Pero entremos en harina, que ya esta el horno caliente. Llevamos un año de datos macroeconómicos desastrosos, al borde de la recesión técnica; con una estanflación (inflación y desempleo por encima del 10%) alarmante. Y a la curia política mundial solo se le ocurre culpar de todo al bastardo Putin. Hombre, cualquier genocida, la tiene, sí; pero no solo él. Como parvulitos olvidamos que la invasión de Ucrania, no es la única guerra en el mundo. Existen conflictos en Palestina, Yemen, Haití, Somalia, Etiopía y muchos más que no importan porque los que mueren están en la otra esquina del mundo o no son caucasianos. Dejamos que nos pongan una venda sobre los ojos, tragamos sus bazofias y como tributo a Belcebú gritamos contra el ruso pasando por alto que los realmente beneficiados son quienes reconstruyen los nichos ecológicos devastados con dólares y planes como lo fue el Marshall a cambio de sumisión.

Amigos hay un tablero de ajedrez mundial y quienes creen que el alfil captura a la dama o que cualquier pieza “mata” al rey olvida que todos los movimientos son configurados por dos mentes, una en frente de otra. Como un caballo más, presto para el mate de la coz, el peligroso BlackRock, no es más que un velo engendrado en 1988, por los peones del Club Bilderberg, Larry Fink y Robert S. Kapito, para distorsionar la realidad.

Estamos cerca de un punto de no retorno y cualquier economista, que lo sea de verdad, y no trague con este blasfemo modelo, ni rinda pleitesía a partido político alguno, debe denunciar el delito ético y moral que se está obrando desde la élite económica mundial y dejar con el culo al aire a los sátrapas que abanderan la subida continua de los tipos de interés para frenar la inflación. Por que esta medida solo sirve para casos de inflación de demanda, es decir cuando hay mucha “pasta” y la oferta es incapaz de cubrir los deseos de compra. Pero, amigos, estamos en una inflación de costes por la alcahuetada subida de precios de energía y materias primas y elevar los tipos solo encarece el dinero, dispara las hipotecas y empobrece a la población. Y ¿Por qué se hace entonces?. Entre otras perversas intenciones, para evitar que los fondos de inversión y capitales internacionales se deslocalicen hacia USA donde son más rentables por que la Reserva Federal Americana lleva más de un año subiendo sus tipos.

Para terminar, dudar de la medida estrella presentada como impuesto solidario contra la banca y energéticas, por que como oligopolios descontrolados, que son, lo repercutirán sobre sus clientes. De hecho el Banco Central Europeo eso alienta. Pero amigos, recordad que quienes más ganan con toda esta dislocada y desenfrenada crisis de inflación son precisamente los Estados vía impuestos. Ahí queda eso, para quien quiera recoger el guante.

Al final, como Taylor en “El Planeta de los Simios”, clavadas sus rodillas en la arena de la playa, plegado ante lo que fue la Estatua de la Libertad, “yo os maldigo, por que lo vais a lograr”. Ya esta bien de rendiros a los oligopilios, que esperéis turno ante la puerta giratoria para introduciros en el festín y de decir, con aseveraciones opacas, incongruencias que ninguna Facultad de Economía pudo enseñaros alguna vez políticos de agua dulce.

Ejercicio de equilibrio de mercado. Niveles 4°ESO y 1°Bachillerato.

martes, 11 de octubre de 2022

SOIS TODAS UNAS ZORRAS. SALID DE VUESTRAS MADRIGUERAS

 

Duelo a garrotazos - Fundación Goya en Aragón

No, mil veces no; ni estos voceros tienen escrúpulos, ni nadie tiene el derecho para injuriar a su prójimo de esta manera. Lo más vergonzoso, es que ha tenido que ser un vídeo subido a las redes por una de las chicas vejadas para que se haga evidente, ante la sociedad, algo que de todos era conocido y que terriblemente algunos justifican como divertido, parte de las novatadas y de los ritos de paso de los universitarios. No, no son solo las chicas del Colegio Mayor Santa Mónica las únicas que tiran el rey al tercer movimiento de partida y se solidarizan con sus compañeros-agresores; “Son unos niños buenos... Es solo en broma… Claro, es que desde fuera no se entiende”, decían, ellas, ante las cámaras. Chicas jóvenes haciendo suyo y verbalizando el mismo relato que las víctimas de violencia de género usan para exculpar al maltratador que las ejecuta, día tras noche, en el silencio del hogar.

Vídeos, audios y contenidos diversos se han descubierto ahora, olvidados en los aparadores del oscurantismo más cafre, con más de una década de reposo en las vitrinas del machismo más soez. Unos con grabaciones donde ellos las violentan a ellas; pero además otros en los que éstas agreden a otras chicas de Colegios próximos. Una suerte de relaciones-agresiones de predación hacia los de la misma especie que raya con el canibalismo social más blasfemo y reaccionario.

Ya está el caballo dentro de las murallas de Troya, y que más da. Ante tal monstruo y para quedar bien en la foto los dirigentes patrios se rasgan las vestiduras, claman venganza y piden castigos. Habría que preguntarse cuantos eran conocedores o quizás participantes en sus tiempos mozos. Incluso, recientemente alguno firmó artículos, subidos de supremacismo, para las fiestas colegiales de la hermandad de turno. Y en este “sindios”, ha tenido que ser la Embajada de Alemania la que puso cordura denunciando los saludos nazis de estos caballeros. Por que allí un seig heil es delito.

Sociedad hipócrita más allá de la Academia, recordad el wasp del Sr. Iglesias, ex-vicepresidente español, presuntamente contenedor de toda serie de “perlas”, dignas de un sátiro, contra la periodista Mariló Montero; entre ellas “azotar hasta sangrar”. Sí, luego se disculpó, igual que ahora la mesnada del Colegio Mayor Elías Ahúja. Pero eso, amigos, ya no vale; por que tanto “dar p’atrás” y blanquear comportamientos similares es pábulo para que boy-bands de cachorros neonazi salgan a escenarios y redes sociales elogiando y desafinando sobre el golpe de estado de 1936 y la necesidad de marginar a rojos, personas LGTBI, y en el fondo a todos los que tengan más de dos neuronas en su cerebro sin que al conexionar se cortocircuiten. Será por envidia.

Algo falla. Pero, ¿el qué?. En medio de todo este sarao, lo fácil, lo atávico y manido, es atacar la Educación o a sus profesionales y que quienes diseñan las Políticas del ramo voceen contra lo que ellos y ellas mismos han parido. Como si tras cada cambio de Gobierno, las Leyes nacieran como los humanos en la distopía de Aldous Huxley “Un mundo feliz”, es decir en una incubadora que aleatoriamente iba inyectando alcohol y otras sustancias extrañas en los cerebros de fetos embolsados en placentas de vinilo para distribuir a los neonatos en la pirámide social. ¿Os suena?

Para castigo eterno de algunos iluminados legisladores, hace unos meses, Arturo Pérez-Reverte escribía un artículo titulado “Ahora somos un país de genios”.

Lo más patético, es que nadie hace caso de quienes vivimos en la Enseñanza -no de Ella-, ni se nos consulta. Claro, como ellos saben de todo y son omniscientes… Por eso son políticos, coño. Y además los palmeros de turno se convierten en talibanes de oficio, justificando medidas como el aprobado universal para descrédito social, el desplome del conocimiento, la debacle y el olvido del acervo cultural por que eso no importa. Luego, los mismos genios, se quejan de la falta de médicos, enfermeros, ingenieros, etc. Cómo los va a haber, sí cuando los alumnos llegan a la Universidad lo hacen despojados de las herramientas y conocimientos necesarios que si poseían, de serie, las generaciones anteriores.

Se derrumba la calidad educativa y sublima hasta el paroxismo el culto al dolche far niente, desterrando el compromiso con el trabajo personal como garantía de superación ante las adversidades. Y cuando estas llegan, que no tardan, el ser humano sin recursos se convierte en un paria, un marginado social muy fácil de manejar y engañar por las élites que sí tuvieron recursos y oportunidad para aprender y formarse. Jo; otra vez llegamos a los Colegios Mayores, privados y adscritos a Universidades diversas. Sí, amigos, sí; por que pese a que se nos quiera narcotizar, quienes llegan arriba son los usuarios de dichos santuarios de oportunidades a cambio de pasta gansa, claro. Los cachorros de linajes que generación tras generación se repartieron esa España, suya, nunca nuestra. Los mismos y las mismas que disfrutan de capeas en las que los ajenos a su credo les servimos de morlacos para el descabello.

Pero no nos engañemos, este canibalismo social es algo estructural y trasversal y el machismo detectado por el Ministerio de Igualdad es solo una rama de un árbol en el cenagoso bosque de la opresión. España nunca vivió una ruptura catártica en la estancada y hedienta sociedad que heredamos desde tiempos del Antiguo Régimen que reinaba antes de la Revolución Francesa. Que sigamos en las mismas es cosa nuestra, yo dudo que los usuarios de las puertas giratorias hagan algo más allá de actualizar, camada tras mesnada, los cánticos con que se se plasma la segregación social de un país que cada vez da más rubor.

martes, 2 de agosto de 2022

LOS SALVAJES, LOS BÁRBAROS

 

Tal cual calificaba el capitán St. Jacques del ejército de los USA, con sus acharoladas botas enfangadas en lodo de sangre y polvo del desierto, una acción de guerra de los apaches mescaleros en la película “Río Grande”, joya en blanco y negro del cine universal que Jonh Ford parió en 1950. Como todas sus obras, ésta trasciende lo políticamente correcto, destrozando el estereotipo de “una de vaqueros”, por eso me mola traerla aquí para introducir el modus operandi de los nuevos salvajes. Los que no se enfangan, ni manchan.

- ¿“Nuevos” has dicho, insensato…? ¿Acaso no has oído hablar de los orfebres en la Edad Media?.

- No, no; cuéntame, “porfa”

Vamos allá. Cuando se relata la Historia del dinero, uno de los capítulos más interesantes recoge la actuación del gremio que amparaba el dinero de los mercaderes locales a cambio de un papel que oficializaba tal acto. Así al desplazarse a las ferias estacionales, a cientos o miles de kilómetros, evitaban ser tentación y reclamo de salteadores, “robinhoodses” y “Jessejames” de turno que los esperaban emboscados en recodos y cañadas de paso para robarles la saca, el corazón o el aliento al grito de “la bolsa o la vida”. Una vez en la ciudad de la feria, visitaban al orfebre autóctono e intercambiaban papel por monedas, oro, perlas o lo que fuera.

Pero sigamos con los artesanos-benefactores y avancemos décadas o siglos en el relato. La “histeria” económica cuenta que, acto seguido, aparecen los bancos, casi como por arte de magia. Llegados aquí, no hace falta ser premio nobel, ni Ministro de Economía de cualquier República Bananera para entender que los orfebres, podres de “pasta” comprendieron que podrían prestar dinero a cambio de un módico – entiéndase que uso este calificativo con retórica – interés y a la vez van a asociarse con otros miembros del gremio para amasar más poder y fortuna... O prodigio, nacen los bancos y no me refiero a los del parque, claro.

La Historia humana está plagada de tipos abyectos, agrupados en clases sociales y estamentos, que se aprovechan de las oportunidades y fisuras de la estructura social para vulnerar los derechos de sus semejantes. Desde las pirámides de Egipto, hasta el infinito y más allá, sin escuchar a humanistas como Dante, Petrarca o al Teniente Coronel Kirby, comandante del fuerte al norte del Río Bravo-Grande.

Henos aquí ahora, en la U.E. verano de 2022, año nono del cambio climático. Ante una crisis estructural sin parangón, con una tasa de inflación próxima al 11% y un desempleo endémico. Todo lo que “El Manifiesto Comunista” alertaba desde 1848. Y con los descendientes de los orfebres, sentados en torno a las obscenas mesas del Club Bilderberg o de Londres. Un caldo de cultivo propicio para que isntitucionalistas y políticos rendidos al Sistema den rienda suelta a medidas neoliberales que redistribuyen, como por efecto de una perversa gravedad inversa, los recursos de los pobres hacia los ricos. Como si la arena del reloj ascendiera por obra de Belcebú.

Algunos pensareis que me corroe la envidia por no ser parte del 4% de la población española, entre ellos los políticos claro, que ganan más de 60.000 € al año y que escribo o hablo resentido. Nada más lejos de la realidad. Lo que me perturba es pensar que los colegas que llevan las riendas de la economía mundial no debieron acudir a clase el día que sus profesores explicaron los conceptos de inflación de costes y de demanda. No sé, quizás habría que mirar el documento de asistencia en el archivo de la Universidad correspondiente. Y espero que sus firmas no aparezcan... Por que si no…!!!!

Queridos amigos. Una inflación de demanda, como la que sufre USA, surge porque los consumidores, con gran poder adquisitivo, desean comprar mucho más de lo que se fabrica. De ahí que, ante la imposibilidad de producir más cantidad, los precios suban. Solo en esta situación, la Teoría Económica propone, como medida eventual para evitar el recalentamiento de la economía, su posterior shock y caída en barrena, la subida de los tipos de interés. Cuando, por contra, nos encontramos en una inflación de costes; es decir cuando todo se debe a una espiral ascendente en los precios de los recursos y factores productivos, establecer un incremento en los tipos de interés solo sirve para disminuir el poder adquisitivo de las personas, la demanda y deprimir más la economía.

Una horrenda realidad, terriblemente descarnada, infinitamente peor que la topada por el capitán St. Jacques, entre el lodo sanguinolento, producto del cuchillo apache. A saber; la subida de tipos propuesta en la U.E. no sirve para reflotar las economías familiares, ni las PYMES, y tiene como objeto único evitar que los capitales internacionales fluyan hacia USA cuya Reserva Federal se ha enrolado y enrocado hace tiempo en una política de subidas continuas para fortalecer el dólar frente al euro, favorecer su comercio internacional y atraer los flujos antes mentados.


Primeros efectos negativos de la subida de tipos en la U.E. Aumento del ...

Sobre las agresiones con drogas de sumisión verano 2022

Sobre los pinchazos y agresiones contra la libertad de las mujeres con drogas de sumisión

martes, 12 de julio de 2022

Efecto de impuestos indirectos en la economía

 En situaciones en las que las empresas tienen gran poder de mercado -oligopolios- los impuestos distorsionan las posibilidades del consumidor final, porque los efectos finales son transmitidos hacia éste.

viernes, 21 de enero de 2022

LOS POLÍTICOS, EL ESTADO DEL BIENESTAR Y EL WORKFARISMO

 

El Estado del Bienestar es un modelo político económico y social en el que el Gobierno ayuda a la Sociedad a cubrir las necesidades de sus ciudadanos. De esta forma, y si la actuación política es eficiente, se evitan abusos de poder por parte de oligopolios, holdings y otros similares. Así dicho, parecería una utopía inalcanzable en la actualidad pese a que bellos bustos parlantes nos quieran narcotizar con sus mantras. “Todo va bien”, “Nade se quedará atrás”, “Vamos a reducir la pobreza”, “Somos la alternativa a los filoetarras”, “Comunismo o Libertad” y otros más, a babor y estribor, que distan mucho del originario Om Mani Padme Hum” del Budismo.

Según antropólogos como Karl Polanyi, el Estado del Bienestar nace en la Alemania de Bismark, con seguros de enfermedad en 1883, un régimen de accidentes industriales en 1884 y un seguro de vejez e invalidez en 1889. Pero ya anteriormente, durante el Estado Prusiano, se había empezado a luchar contra la pobreza y en favor del seguro social. Incluso antes, en 1536 podemos considerar como su origen las “Leyes de Pobres” en Inglaterra y Gales. Cómo veis, no hablamos precisamente de anteayer. Sí la Historia recoge esta realidad; ¿por qué en la actualidad triunfan modelos como el workfare de los USA?. Pues sencillo; porque precisamente, en ellos, se culpa a las personas de lo que les ocurre y así el Estado se puede lavar las manos y dedicar sus recursos a “invertir” en aquello que les sea más rentable.

Un Gobierno realmente social, que no socialdemócrata, (recordad que el PSOE sacrificó su identidad Marxista en Suresnes) sería aquél que potencia varios campos, a saber:

Sanidad, más personal médico, instrumental y equipamientos. Y ya veis lo que ocurre en España, pese a que el mantra diga “Tenemos la mejor sanidad del mundo”. Qué se lo pregunten a los profesionales - que sí son los realmente competentes- o a los pacientes y sus familias en la pandemia. ¿Por qué emigran los jóvenes sanitarios hacia el norte de Europa?. Por cierto, el workfare estatal aquí es muy peligroso porque culpa al enfermo de su padecer, mientras por otro lado se vocea “todo esta superado”, “tenemos que vernos las caras y las sonrisas” o “vivir a la madrileña”. Y “zasca” la sexta ola.

La Educación, monta tanto que en el caso anterior. Los “profes” estamos hartos de tener que cumplir con Leyes de Educación cada vez peores. Porque nos damos cuenta que de la óptima formación de nuestros alumnos depende el futuro del país. Y eso, precisamente, hace mucho tiempo que no importa, porque cuanto más endeble sea la formación de las personas más fácil se asumen los mantras. ¿Qué me decís de la gestión de la pandemia y su mantra “los centros educativos son lugares seguros”?. No me puedo creer la gente se lo pudiera tragar. La realidad, veinticinco – más menos dos – alumnos por clase y un profe en treinta metros cuadrados. Y nuevamente con la sexta ola el “workfarismo” dirá que los profes se quedan de baja por que no quieren ir a trabajar cuando caen “puchereros” por ómicron o que los alumnos buscan pirar clase, como Bart Simpsom.

Finalmente, la cobertura social queda también vilipendiada por el “workfarismo” con mantras siniestros como “quienes reciben ayuda son unos vagos que no quieren trabajar” o “un “mena”, varios miles de euros, tu abuela 500”.Triste, porque podríamos decirle a quien los recita que deje su sueldo público y viva con la ayuda a minorías o familias en exclusión. Luego, cuando llega la chapa y pintura, para la galería y los votos, se aplican mal las políticas compensatorias y te encuentras con personas a las que se las multa por supuestos errores administrativos o que ven incrementada su carga en el IRPF del curso siguiente porque la ayuda le hace saltar de peldaño contributivo.

Un secreto de familia: Hace más de treinta años, uno de los mejores economistas españoles recientes, por cierto, nacido en El Entrego; Economista del Estado, profesor de la Uni de Oviedo y la UNED, al que dudo que alguno de los que venimos detrás le podamos dar sombra a la altura del aquileo, le había dicho a mis padres, en confianza por la amistad que les unía, algo que a un mocoso como yo, por aquélla, me heló la sangre: “En España vamos a quedar para trabajar el tercer sector, concretamente la hostelería… Y en Asturias “pa facer cuchillos y navayes”, no hay otra. Y eso viene de Europa”. Por desgracia ninguno de los tres está aquí para ver cuan cierto era aquel vaticinio.